Años atrás cuando aún era un crío
veía a los niños jugando en el olivo
veia la tristeza de mis ojos reflejados
en el cristal de la clase de al lado.
Me sentía impotente de no poder jugar
pero no es mi culpa no poder dejar amar
estaba enamorado de una bella dama
cuyo nombre me sonrrojaba.
Era tan bella que su sonrisa deslumbraba
sus ojazos oscuros me enamoraban
lastima que ella sea bella y yo inútil
pero en el amor no es lo más útil.
viernes, 22 de mayo de 2009
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